Haz clic en la imagen para ampliarla
Fecha de edición: 28/02/2006
EL REY SIMPLÓN
El bonachón rey Simplón 13 solo cobraba impuestos a sus súbditos cuando la cosecha había sido buena. Claro está que apenas tenía dinero, y el poco con que contaba se lo gastaba en trajes para su caprichosa novia, y en contratar más ministros. La llegada al país de un dragón hizo cundir el pánico y el rey Simplón 13, en solitario, tuvo que ir a enfrentarse con él. ¡Pobre dragón! Todo su problema consistía en que necesitaba gafas: era miope. Dispone de Juego de Lectura (n.º 83), de la colección Lectura Eficaz.
El contacto de seguridad todavía no está disponible. Si necesitan esta información solicítenla mediante este enlace
Este artículo no tiene advertencias de seguridad. Si tienen alguna duda al respecto consulten al contacto de seguridad.