Desde mediados del siglo XX, las principales causas de mortalidad en las sociedades desarrolladas han dejado de ser las enfermedades agudas como las infecciones. Estas han sido sustituidas, en este macabro ranking, por las muertes causadas por enfermedades degenerativas. Entre estas últimas encontramos el Alzheimer, las demencias y el ictus. Pese a ello y a pesar de la importancia del cerebro en nuestra vida, nuestra cultura y nuestra salud, la sanidad pública y la investigación científica aún hoy no dedican los suficientes recursos para atajar el problema, lo que provoca, entre otras cosas, la proliferación de fake news y falsos mitos asociados a determinados productos dietéticos y alimentarios. De ahí la necesidad de trabajos como este, una guía completa, científica y actual que aborda las claves teóricas y sobre todo prácticas, relacionadas con la alimentación y nuestros hábitos de vida, para mantener nuestro cerebro y nuestro cuerpo sanos de verdad.